Uno de los principales requisitos para obtener la nacionalidad española por residencia es superar dos exámenes; uno de Conocimientos Constitucionales y Culturales de España (CCSE) obligatoria para todos los solicitantes, tipo test y bastante sencillo. Salvo para todos aquellos que hayan solicitado la correspondiente dispensa.

Y otro de conocimiento del Idioma Español (DELE A2), obligatorio exclusivamente para aquellos ciudadanos originarios de países de habla no hispana, que aunque no es excesivamente complicado si requiere que el solicitante sepa leer, escribir y comprender correctamente el idioma castellano.

El examen consta de cuatro pruebas divididas a su vez en varias tareas con un tiempo específico para cada una de ellas. Normalmente empieza a las 9 de la mañana hasta el mediodía realizándose en este tramo la prueba escrita, y continuando por la tarde con la prueba oral.

La primera prueba es de comprensión lectora, comprende varios textos con preguntas relacionadas sobre los mismos.

La segunda prueba es de compresión auditiva, escuchar un texto, conversaciones o frases y contestar preguntas sobre lo escuchado.

La tercera es de expresión e interacción escrita, consiste en completar un formulario, escribir un  texto o describir un paisaje, historia….empleando para ello un determinado número de palabras.

La prueba cuarta se denomina expresión e interacción orales, mantener una conversación con el entrevistador de un tema libre, preparar un monólogo sobre un tema elegido previamente, describir una fotografía etc…

Cada prueba tiene un valor del 25%, siendo necesario para aprobar obtener un 30% en las pruebas auditivas y orales y otro 30% en las de expresión escrita y comprensión lectora.